martes, 4 de noviembre de 2014

Y colorín colorado... este cuento se ha acabado!! (dos meses y muchas fotos después)


Bueno pues... parece que se acaba. La aventura berlinesa toca a su fin. 
Dos meses, muchas visitas y varios pretzels (de más) después :)

Dos meses en los que hemos aprendido muuuuuuuuchas cosas (quizá no muy prácticas, pero cosas al fin y al cabo), como por ejemplo: que los dependientes alemanes son muy lentos, que la fruta de los supermercados es española, que la gente te sonríe cuando cruzas la mirada accidentalmente (no es que estén intentando ligar contigo, ojo), que si intentas hablarles en alemán ellos te contestan en inglés (así como diciendo, tu alemán muy bueno no es...), que les encantan los restaurantes vietnamitas, que en carteles y señalizaciones no se les va el presupuesto, que hacen huelgas brutales (sin servicios mínimos ni nada) de transportes, que no tienen wifi en las cafeterías ni sitios públicos en general, que comen a las 11 (locos...), que su hora del café es a la 13 (más locos aún...), que son deportistas olímpicos todos ellos, sin excepción (veáse el vol.I de Berlín para frikis si se pone en duda esta afirmación), que los niños alemanes son absolutamente adorables (y que no es tan fácil coger uno y echar a correr)...


Cosas que NO hemos aprendido: la cerveza. Lo siento, pero sigue siendo mi asignatura pendiente, no hay forma de que me guste (aunque tampoco es que lo haya intentado muy duro, la verdad). Sé que con esta confesión pierdo inmediatamente a un gran número de seguidores, pero si no lo digo yo saltará igualmente a la prensa en cualquier momento, así que así, aquí y ahora: no me gusta NADA la cerveza. Ni siquiera la alemana. Ala ya, ya lo he dicho.

Y llegados a este punto diréis, muy bien María, gracias, ahora nos sentimos mucho más completos. Lo sé. Pero también sé que aunque os encantan mis reflexiones, os gusta más cuando pongo fotos y os veis en ellas o podéis criticar a los que salen (mala gente, que eso es lo que sois). Así que aquí va, porque esta entrada es para Berlín, por haberme enamorado en dos meses, pero sobre todo es para toda la gente (y ha sido mucha) que de una forma u otra ha contribuido a que este periodo se me hayan pasado volando. A los que habéis venido a visitarme, y a los que me habéis encontrado accidentalmente por aquí. A todos, gracias. Ha sido una experiencia genial :)

Y una vez dicho esto... espero que esteis preparados, porque
 luces, cámara, acción!!


















Y bueno venga que no! que no seáis egocéntricos! 
Gracias a todos porque me lo he pasado genial con vosotros por aquí, pero gracias sobre todo a Berlín! 

Gracias a sus luces, a sus barrios, a Friedrichshein por molar tanto, a sus cafés literarios, a su transporte 24 horas, a su gente por la calle a todas horas, a Charlottenburg, a Kreuzberg, a Prenzlauer Berg, a las canciones en alemán que suenan en mi radio, a las tiendas de postales infinitas, a los schnitzels y a los pretzels de pipas, a las piraguas, a los millones de italianos que hay por aquí, al muro y todas las historias que tiene por contar, a Sophie-Charlotte platz, a los códigos desconocidos para abrir puertas de hoteles, a los castillos al final de la calle, a las tiendas de ropa en rebajas, a las que no están tan de rebajas, a los indios con comida para 20, a la máquina que da cafés sin vaso, a los teléfonos que se intercambian misteriosamente, a los miércoles de pescado y los viernes de patata asada. A los cafés que se caen, y a la embajada de mongolia. Y a mi pared porque se ha ido rellenando poco a poco y al final ha quedado perfecta!


Pero sobre todo, a Mauerpark por sus domingos inigualables de garbanzos con curry, de fritz-cola y de crepes, de puestecillos y de compras incontrolables. A sus miiiiiiiiiiiles de personajes, que tanto nos han hecho reír y que difícilmente olvidaré................. ainsssssssssssssssssss <3 <3 <3





Y ahora sí que sí, con esto y un bizcocho... damos por clausurada la aventura alemana!!! 

Sólo dos cosas más por decir:

A Berlín, que nos vemos muy pronto, que no me olvides, ¿eh? que mira que te hecho una publicidad inigualable...


Y al resto, en una última demostración del alemán aprendido en este tiempo, ¿qué deciros? 
Pues qué va a ser, que...




... ci vediamo a Madrid!!!






PD: Y gracias también a los Beatles, claro ;)


2 comentarios:

  1. Se que siempre estaré en tu lista negra!!!! Pero me hubiera gustado leer en tu blog un agradecimiento a los que queríamos ir a verte y no hemos podido y también a los que nos acordábamos de ti cada vez que cocinábamos. En fin, en otro viaje será...Buen viaje!!!

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  2. Hay que ver!! Que sensible está el personal. Tanto cocinar y ni una tartera de recuerdo

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